Reunidos en la sede de la Biblioteca Valenciana, los poetas coinciden en que a las gentes mediterráneas nos acercan los sentidos más que la razón.
El sábado 8 de octubre finalizó el Encontre d’Escriptors del Mediterrani en el marco de la Mostra Viva del Mediterrani. Begonya Pozo y Xelo Candel del Aula de Poesía de la Universitat de València fueron las introductoras y moderadoras de una mesa redonda y un recital de poesía.
Entre los poetas, Abdul Hadi Sadoun, de Irak, compartió que Bagdad, centro histórico de atracción de las culturas mediterráneas y orientales, a pesar de la situación actual, mantiene una activa vida cultural. Abdul ha traducido y contribuido a difundir muchos poetas españoles y en especial a Machado y la Generación del 27.
Por su parte Tonko Maroevic, de Croacia, descubrió la poesia catalana, Espriu y Foix entre otros, a través de las traducciones italianas. Estudió catalán y ha traducido sus obras al croata. Maroevic plantea un enfrentamiento permanente entre lo dionisíaco y lo apolíneo.
Este argumento es compartido por Josep Piera. Los sentidos, los goces, las sensaciones aproximan mucho mas a la gente mediterránea que la razón. El poeta de la Safor puso con ejemplo el sustantivo de reposteria “mona» (regalo, ofrenda) se utiliza igual en el magreb.
Lamís Saidi, joven poeta y dinamizadora cultual de Argelia, relató que el conflicto social i político se traduce, en su país, en un conflicto lingüístico. La lengua original es el tamazingh. El árabe fue fruto de la colonización y es para unos la lengua del Coran y para otros en su versión actual la de la tradición poética. El francés es fruto de otra colonización, pero los argelinos la consideran botín de guerra, porque la han hecho suya. En la vida cotidiana no hay problema: se usa el “argelino” que es una lengua híbrida, dinámica, llena de giros, bromas y dobles entendidos. El conflicto surge cuando se escribe. Como síntoma de integración cultural, los argelinos han hecho suyo a Cervantes, que vivió allí como esclavo. Saidi recordó que la palabra “alubia» da nombre al plato tradicional argelino.
Estos poetas leyeron sus obras en árabe y croata y se tradujeron al castellano y al catalán. Al recital de los poetas invitados se unieron los valencianos Juan Vicente Piqueras, Pau Sif y Ruben Luzón.